Amanece y anochece.
Nos levantamos con la luz del sol y, cuando se va por el horizonte, volvemos a tener sueño. El reloj biológico nos dice cuándo comer, descansar, y en qué momento estar más activos, más perezosos o más creativos.
Si bien es cierto que tenemos cierto control sobre estos procesos, se sabe que en realidad ese “reloj biológico” del que habla el común de los mortales es una manera coloquial de referirnos a los ritmos circadianos que sigue nuestro cuerpo sin que nos demos cuenta. Son nuestros genes los que llevan la batuta en su interior, con las instrucciones que seguimos fuera del control de nuestra voluntad.
Es decir, además de la influencia del ambiente, existe una influencia genética en nuestro ritmo biológico, que heredamos de nuestros padres.
¿Quieres saber más y hacer un test para saber con cuál de estos animales te identificas?
¿Eres búho, alondra o colibrí?